El origen de esta celebración se remonta a la época de los Aztecas, quienes en esta fecha rendían homenaje a las almas de los difuntos que año con año visitaban el mundo de los vivos. La celebración se realiza desde hace más de 3,000 mil años.
Los Aztecas creían que Mictecacihuatl también es conocida como la Señora de Mictlan, es del inframundo, según la mitología azteca. Era la encargada de cuidar los huesos de los muertos y presidir lo que luego, con la llegada del cristianismo, sería el festejo del Día de Muertos. Mictecacihuatl, posteriormente, comenzó a asociarse a la ahora tradicional figura de la Catrina.
El culto a los muertos era una celebración de vida para los aztecas, una forma de sentir cerca a los seres queridos.
Para nuestros antepasados el lugar a donde iban los muertos no dependía de cómo se hubieran portado en vida, sino de cómo habían muerto.
Al Mictlan llegaban todos quienes morían de muerte natural. Quienes lo hacían por otras causas, tenían un destino diferente.
Como por ejemplo:
• Tlalocan (paraíso del Dios de la Lluvia) para los ahogados,
• Omeyacan (paraíso del sol) para los que morían en combate o mujeres en el parto
• Chichihuacuauhco para los niños
• Mictlán para los que morían de forma natural.
Con la conquista y la religión cristiana trajeron consigo las tradiciones que pronto se fusionarían con el tradicional festejo azteca y dio paso al Día de Todos los Santos, que se festeja el 1 de noviembre, y el Día de los Fieles Difuntos, el 2 de noviembre.
Se dice que los muertos llegan cada 12 horas, entre los días 28 de octubre y el 2 de noviembre.
El 28 de octubre llegan los que murieron a causa de algún accidente, forma repentina o muy violenta.
El 29 de octubre llegan los que murieron ahogados
El 30 de octubre llegan los olvidados, los que no tienen familia que los recuerden.
El 31 de octubre llegan los que están en el limbo y los niños que no nacieron.
El 1 de noviembre a todos los niños que han muerto.
El 2 de noviembre a los adultos que ya fallecieron de manera natural.
Dando fuerza a los días 1 y 2 de noviembre en México seguimos rescatando y dando paso a la gran tradición de celebrar, recordar y honrar las memorias de los que ya partieron.
Nosotros como todos los años celebramos en Electrical Support con nuestro altar de muertos en memoria de esas personas que han partido y las tradicionales calaveritas donde el fantástico humor con el ingenio que sólo los mexicanos tenemos para poder reírnos de la muerte.